"Mamá, estoy llegando a casa"

Las glorias del Fútbol brillan en el Parque. Félix Díaz custodiado por damas de Newell’s, año 1945.

"no se te ocurra treparte a los árboles, otra vez"... balbuceó Elvira mientras se alejaba Juan, Pedro, Ramón, Raúl, Jorge, Hernán, Víctor, o Claudio. Tantísimos Lepras han rumbeado hacia el Parque Independencia sin un mango moneda en el bolsillo. Se despedían de sus madres una tarde de domingo. Sabiendo que se colarían en el tranvía. Sin chances de ingresar al estadio. Eludían al hostil escuadrón policial, con el objetivo de treparse a los eucaliptos y árboles que superaban en altura a la vieja tribuna que daba al Museo.

La añorada y gloriosa Tribuna Verde. Cuántas Madres cómplices quisieron frenar esa locura. Cómplices, porque así son todas ellas. Y por eso las amamos y respetamos. Porque no importa cuántos kilómetros hagamos a pie, a dedo, en carro, en colectivo o en tren, siempre, siempre estarán pendientes del mensaje que apenas dice: "llegamos, nos vemos más tarde".

Madres queridas, que nos dieron la oportunidad de amar a Newell's Old Boys, guíen nuestros pasos que conducen al horizonte Leproso de "amor y conocimiento". Gracias a ustedes somos capaces de levantar la enseña rojinegra en todos los rincones del país, del continente y del mundo. Todos los días son de reconocimiento hacia ustedes.

Madres queridas, que se quedaron horas eternas remendando el viejo gorrito rojinegro, sin comprender de cábalas o costumbres de tantos apasionados por los colores. Que le han brindado la mayor de las ternuras a la confección de las banderas rojinegras que inundan las tribunas, las estaciones, las rutas, los caminos, y las Jornadas Populares, con la pasión y efervescencia como solo el Pueblo Leproso sabe inundar. Gracias por todos estos años de Gloria Leprosa.

Aspecto de la vieja tribuna de madera en el Coloso, junio 1923. Niñez y Damas de Newell’s.

“… Porqué siempre te siento dentro de mí, vigente; en la fuerza de la sangre que impulsa a mi ansioso corazón… en el estímulo cerebral que me dictan estas líneas pretenciosas de posteridad; que ordena a mis manos nerviosas que concluyen dándoles forma. […] Y mis manos son tus propias manos laboriosas que me guían.” Así dedicaba Parodi su libro a su Madre. Y así recordamos desde estas líneas a todas las Madres Leprosas.

Ana Margarita Jockinsen, Catalina Dodd Cowell, Margarita Semino, Violeta Newell, Madres rojinegras ligadas a la fundación del querido Club Atlético Newell’s Old Boys. En todas las épocas ellas nutrieron los sueños educativos de Isaac Newell, fortalecieron los sueños construidos en el patio de la Escuela, y cobijaron las correrías deportivas de tantos pibitos que se brindaron de lleno a un deporte novedoso.

“Mamá, estoy llegando a casa”. A esta casa llamada Newell’s Old Boys. Esta casa que brilla en el Parque Independencia desde tiempos inmemoriales. Aquí florecen los sueños de la niñez y la juventud. Ese sueño de “llegar” que resulta tantas veces selectivo al destino de cada quien. Aquí vemos y admiramos a tantas madres desvivirse por el crecimiento de leprositas y leprositos que desarrollan sus disciplinas pintados en rojo y negro. Llevando los colores de Newell’s a lo más alto que den las fuerzas.

A todas ustedes brindamos estas sinceras líneas. En una Jornada Solidaria, un viaje, un almuerzo, una cena, o cualquier actividad que desarrollen Departamentos del Club, Peñas o Filiales de Newell’s, tomate un momento para admirar la pasión leprosa con la que trabajan las madres para que todo salga colosal. A todas ustedes ¡Feliz Día!

VIVA NEWELL’S OLD BOYS

Este artículo está dedicado a la memoria de DANI PITU. Gran Leproso querido por todos. Admirable el amor que sentía por la Madre de sus hijos, Vivi, y el cariño que sentía por la Madre de todos los Leprosos que viajamos por las rutas, Amelia Montero. SIEMPRE PRESENTE, SIEMPRE

Extracto del artículo publicado en la revista "ROJA&NEGRA", una lástima que se haya perdido o traspapelado la dedicatoria....

 

Participá, colaborá, ayudá, mirar pasar el festival y criticar sin pelear es siempre mucho más fácil. SALUD a todas las Madres del Club Atlético Newell's Old Boys